lunes, 6 de febrero de 2006

El primer dia llegó

Hoy me levante temprano para estar bien listo en mi primer día de trabajo. La ducha, el desayuno y me fui en el auto con las francesas a la bodega de vinos, la bodega se llama Langhorne Creek Winery, queda a unos 20 kilómetros hacia las afueras de la ciudad, el viaje demora entre 15 y 20 minutos, tiempo que deberemos considerar cuando nos levantemos cada día.
Llegamos a la bodega un poco antes de las 7 am, nos sentamos en el Lunch Room (sala de almuerzo) y esperamos ahí por un rato. Mientras estábamos ahí entraban los trabajadores y me decían “G’day mate”, yo no entendía lo que quería decir y sólo movía la cabeza como respuesta, en mi mente pensaba “mate” será porque no saben pronunciar mi nombre y tratan de decir “Manuel” o sea ya saben que viene un tipo llamado Manuel a trabajar aquí?. Bueno, voy a contarles mi segundo gran shock idiomático, ese mismo día me atreví a preguntar porque me llamaron “mate” si me llamo Manuel, y cáguense de la risa, “mate” significa “amigo” en inglés, (jajaja) yo no tenia la menor idea de esa expresión, sólo conocía “friend”. Esa fue mi segundo bochorno idiomático, pero era el comienzo, vendrían muchos, cada día y a cada instante.

Sigamos con la historia, a las 7 en punto nos dirigimos a las oficinas, donde nos esperaban los enólogos y la jefa de la bodega (otra francesa, llamada Emma) Me presentaron a los que serán nuestros jefes durante todo el proceso, los 3 enólogos de la bodega, nos dieron la bienvenida y uno de ellos nos comenzó a decir nuestras labores y de ahí nos invito a conocer todo el lugar para comenzar a familiarizarnos, comenzamos por el laboratorio, entramos y habían 2 chicas trabajando, una australiana grandota y una asiática bajita. Aun recuerdo la vergüenza que pasé en ese momento (estoy escribiendo esto 1 año y medio después de ocurrido y sigo sintiendo vergüenza de lo que pasó), me acerqué a saludar a la asiática, le di la mano y le quise dar un beso en la mejilla (como lo hacemos en Chile normalmente) y la mina pegó un grito y se asustó montones, como si yo la hubiese querido besar en la boca o algo así, me puse rojo de vergüenza y no supe como explicar que era la costumbre en mi país y trate de pedir disculpas. No hubo caso, desde ese día la asiática jamás me habló ni me dirigió la mirada, nunca, fue la única con quien no crucé jamás una palabra. Aun siento vergüenza e incomodidad por la situación, esta vez provocada por las diferencias culturales.

Luego de ese momento, que no he podido olvidar, el enólogo nos mostró toda la bodega, los tanques, las prensas, la bodega de barriles (también conocidas como barricas). Después volvimos a las oficinas, firmamos algunos papeles, y nos mostraron como realizar algunas labores dentro de la bodega, tomar muestras, medir temperatura, medir la densidad, agregar químicos, agregar hielo seco, usar las bombas, nos mostraron donde estaban las mangueras, las herramientas que usaríamos, nos mostraros todos los detalles, parecíamos esponjas viejas, tratando de absorber todo, pero era imposible, mientras trataba de traducir una frase en mi mente, me perdía las 2 o 3 freses siguientes y trataba de formar la idea completa con sólo algunas palabras.

Pasado el medio día nos fuimos a almorzar, estuvimos media ahí, luego volvimos a la oficina por más trabajo, ya estábamos aprendiendo algunas cosas básicas y simples de hacer, mientras nos acostumbramos al trabajo y aprendemos los procedimientos. Es todo nuevo, intrigante, provoca nervios, ansias, quiero hacer lo mejor posible, no mandarme cagadas y aprender inglés es lo principal.

Los turnos serán por esta semana, de Lunes a Viernes, de 7:30 a 16:00, pero luego pasaríamos a trabajar de Lunes a Sábado de 7:30 a 19:30 (12 horas al día). Llegada la hora de terminar nos avisaron que nuestras tarjetas para marcar nuestras llegadas y salidas estaban listas, así que ahora ya podíamos marcar nuestros tiempos sin problemas.

Los que me preocupaba era que no tenía auto y no podía depender de las francesas todo el tiempo, por los que debía comprar unos lo antes posible. Por esta semana viajare con ellas, pero la próxima semana ellas pasaran a trabajas en el turno de noche y yo no tendré como ir a la bodega. Además debía considerar el hecho que no tenía el dinero para comprar un auto, de donde sacaba el dinero?. Bueno tendría que ver como resolvía el problema, por ahora seguir aprendiendo, poner atención y acostumbrarse al trabajo, las costumbres, la gente, el idioma, a todo.